LUIS MÉNDEZ HERNÁNDEZ
Las ferias surgieron como una celebración por una buena cosecha en la región o para conmemorar un gran acontecimiento en el lugar y contaban con la participación activa de sus habitantes quienes proponían eventos festivos que dieran realce a su identidad. En la parte artística surgían trovadores, saltimbanquis, danzas típicas, y todo aquello que hiciera lucirlos y se mostraba lo mejor de la gastronomía, es decir todo lo que pudiera ilustrar su folklór regional.
Ahora es muy diferente, los gobiernos que se apropian de las ferias responden a intereses meramente comerciales o en su caso a intereses políticos. En Nayarit, se destaca en los medios de comunicación que la feria será “gratis” lo que me evoca a una invitación donde nada cuesta. Sin embargo sí cuesta, le cuesta al pueblo que paga sus impuestos, es una invitación muy seductora para que las familias “gasten” su dinero en la feria, qué triste sería para un padre de familia no comprarle a su hijo un juguete o un paseo en los juegos mecánicos e irse con la panza vacía ante tales “Manjares” de otros estados de la república.
¿Entonces dónde está lo “gratis”? Ciertamente en los conciertos de los “Artistas” de talla nacional e internacional no se cobrará la entrada, pero ellos ¡por supuesto que cobran! y cobran ¡Bien! y lo que me parece perverso, pernicioso y hasta insultante es que a los artistas locales los presentan como artistas de segunda.
Esto ocurre cuando los gobernantes no tienen claro para que quieren una feria, porque no tienen claro como definir políticas públicas, bueno ni siquiera saben que existe la cultura en su estado y por supuesto menos saben si sus habitantes consumen sus propios productos culturales.
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