De este señorío dependían tres reinos o tlahtoanazgos (donde gobierna un tlatoani, señor o cacique):
1. Centispac o Teimoac (gobernado por Ocelótl), sus pueblos eran: Atecomatlán o Momote (Santiago Ixcuintla), Axcalán, Oxaltepec, Tuxpan, Coatlán, Acatlán (Acatán de las Piñas), Tepehuacán, Ixcuintla, Omitlán, Ayotuxpan, Yago, Onachi, Caramota, Zapotán, Mexcaltitán, etc.
Este tlahtoanazgo o cacicazgo, que significa lugar de sementeras de maíz, fundado por grupos humanos que llegaron del norte del país en la época de las grandes migraciones hacia el centro de lo que hoy es México (Horizonte Clásico) se localizaba fundamentalmente en el actual municipio de Santiago Ixcuintla y parte del de Tuxpan, teniendo como límites geográficos los ríos Santiago y San Pedro.
El centro más importante era Sentispac y otros destacados fueron Amapa, Botadero y Coamiles (este último en el actual municipio de Tuxpan). Además de la abundante pedacería de cerámica se han localizado testimonios de la vida cotidiana: maquetas con personas realizando alguna actividad, reproducciones de casas habitación y del juego de pelota.
En el momento del contacto con los conquistadores españoles, el señorío era gobernado por Océlotl, quien los enfrentó según las crónicas a Nuño Beltrán de Guzmán con valentía y conocimientos de buen guerrero.
En Coamiles, municipio de Tuxpan se han realizado estudios arqueológicos (por Christian Duverger, investigador francés y recientemente por Mauricio Garduño del Centro INAH Nayarit) permitiéndonos conocer que allí existió una población importante que en el cerro tuvo su centro ceremonial, ahí se localizan petroglifos y diversos montículos que probablemente formaron parte central de este asentamiento prehispánico.
2. Acaponeta, que comprendía los siguientes pueblos: Tecuala, Chimapan, Ayoácan, Ayacapan, Zitatlán, Zaulán, etc.
3. Tzapotzinco, ( el Zapotito), sus principales pueblos se ubicaban en un territorio que se encontraba entre el río San Pedro y el río Santiago, ahí gobernaba el cacique Panténcatl.
Sus pobladores cultivaron maíz, frijol. Calabaza, tomate y algodón. Intercambiaban con pueblos lejanos vistosas plumas de aves, obsidiana, conchas de mar, sal, pescado seco, miel de abeja, tela y materiales para artesanos. Eran buenos músicos, poetas, danzantes y escultores.
Construyeron las aldeas más grandes de su tiempo, de poco más de mil habitantes y casas de madera enjarradas con barro y techos de zacate. También pirámides, plazas y juegos de pelota. Corinca era el gobernante en el momento que llegaron los españoles.
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