Por: Oscar González Bonilla.
Tal parece que el gobernador de Nayarit, Roberto Sandoval, dosifica, con base en las circunstancias, argumentos en contra de Ney González, quien fuera también mandatario estatal de 2005 al 2011, sexenio muy cuestionado por los nayaritas virtud al elevado endeudamiento público, calculado en casi siete mil millones de pesos, y la corrupción galopante entre funcionarios de esa administración.
Decirle payaso a Ney no es ofensa alguna, es tan ocurrente que muchas de sus acciones caen en el ridículo. Calificarlo como cobarde, ahí está el detalle. Siendo presidente municipal de Tepic (2002-2005), Ney salió por la noche a las calles de la ciudad trepado en una camioneta y enfundado en un capote enfrentó el vendaval provocado por el huracán Kena, supervisó las zonas de riesgo y en el altavoz de la unidad alertó a la población. Fue esa una actitud valiente.
También, ya como gobernador, se puso al frente de los operativos policiales de combate al crimen organizado y públicamente ofrendó su vida en defensa de los nayaritas cuando el narco que mata realizaba impunemente a sus anchas enfrentamientos a balazos en calles de Tepic, a cualquier hora, a consecuencia de la inseguridad pública. Ney manifestó que si moría en el intento se iría al cielo y desde allá combatiría al mal. Habrá que reconocer que ésta fue una hazaña heroica ejecutada con valor. Entonces, cobarde cobarde no es.
Por lo que se sabe, Roberto Sandoval es una persona que no olvida, pero tampoco perdona. Mira que Ney restregarle en la cara que no aparecía por ningún lado cuando ocurrían sucesos violentos en la ciudad, siendo el primero presidente municipal de Tepic y el segundo gobernador de Nayarit. Pero lo peor fue que el regaño Ney lo hizo del conocimiento público en redes sociales de la internet y también trascendió a la televisión con cobertura nacional. Fue un golpe psicológico que Roberto no olvida.
Tampoco echa al olvido el trato de escasa colaboración que el gobernador Ney González dio al gobierno municipal de Roberto Sandoval. Deseaba éste que tan siquiera lo hubiera apoyado como lo hizo con Manuel H. Cota, quien como alcalde de Tepic tuvo trato de privilegio por parte del mandatario estatal, tan sólo avaló una solicitud de crédito del ayuntamiento por 80 millones de pesos, pagaderos a 16 años. Desde 2002 que lo despojaron de la candidatura a regidor al ayuntamiento local con base en una maniobra de la dirigencia cenopista del PRI, que sería su primer cargo de elección popular, en lo que seguramente mucho tuvo que ver Ney como candidato a alcalde, Roberto Sandoval ha acumulado resentimiento, pues han sido una tras otra.
En referencia al tema encontré declaraciones de Roberto Sandoval grabadas en audiocassette cuando era presidente del Ayuntamiento de Tepic. Dice que cuando joven fue rebelde, inquieto porque deseaba que la San Antonio fuera la mejor colonia de la ciudad. En política ahora tengo que aguantar injusticias tan tremendas, que si hubieran ocurrido 20 años atrás las arreglara de otra manera, pero soporto por la sociedad, tengo una representación y no puedo cometer errores ¡Qué injusticia! Ojalá todo fuera transparente y claro, que así fuera la política, pero es todo lo contrario, los políticos hablan una cosa y esconden la verdad.
Luego señala que es creyente en Dios, católico guadalupano. Mínimo cada tres días llevo flores a la virgen y le pido que me de tolerancia, sabiduría y humildad, todo lo que sea posible para no fallarle a mi pueblo. En política romper esquemas me ha causado muchos problemas, pero seguiré así hasta que me muera, porque si no hay alguien que se atreva a cambiar esto seguiremos teniendo problemas en la política
Narra que cuando supo que sería candidato del PRI a regidor trabajó como loco por todo Nayarit, llegó a celebrar reuniones hasta con tres mil tablajeros y comerciantes, era secretario de Organización de la CNOP estatal. “Como primero en la lista, me decían que yo era el regidor más seguro del mundo, nadie me podía quitar mi regiduría, incluso se afirmaba que iba en caballo de hacienda por la fuerza que tenía. Pero en la hacienda dejé el caballo, no fui candidato porque de aquí (Motel La Loma) al Instituto Estatal Electoral camino al registro, todos aparecieron en la lista menos yo”.
Aún falta que el gobernador Roberto Sandoval sorprenda a los nayaritas, antes que sea tarde, al dar a conocer el real monto del quebranto financiero, el daño patrimonial al Estado y el nombre de funcionarios de la administración neycista que realizaron ejercicio indebido de funciones, abuso de autoridad y peculado. Pero además que presente denuncia penal, o será cobar
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