Con el propósito de llamar la atención frente al fenómeno de la violencia contra las mujeres, rubro en el que el Estado de Colima ocupa uno de los primeros lugares en el país, el Colectivo Sin Sostén inició una serie de intervenciones artísticas urbanas a través de murales alusivos a los derechos de las mujeres.
La primera obra es un mural elaborado por la pintora Irene Delgado sobre una pared de la calle José Antonio Díaz, entre las calles Reforma y Degollado del centro de la ciudad.
La imagen, elaborada en tono sepia a base de chapopote, contiene el rostro de una mujer de ojos grandes con una mariposa posada sobre sus labios, acompañada de la frase “¿Cuánto tengo que hablar para merecer libertad”.
De acuerdo con Massiel Hernández García, integrante del Colectivo Sin Sostén, la serie consta de cinco murales realizados por diferentes artistas que colaboran gratuitamente con el proyecto, basados en frases seleccionadas de una consulta convocada a través de las redes sociales.
“Mucho de lo que nos mueve –dijo– son las estadísticas de la violencia, lo que percibimos; creemos que es alarmante la situación de violencia que se está viviendo y esta es nuestra reacción: querer aportar, contribuir a la reflexión y a que la mujer se sienta empoderada; nuestra intención es decirles a las mujeres de Colima que no son las únicas, que debemos alzar la voz, no quedarnos estáticas, sino movernos para luchar en contra de la violencia”.
De acuerdo con los resultados de la Encuesta Nacional sobre la Dinámica de las Relaciones en los Hogares (Endireh) 2011, Colima ocupó el primer lugar en violencia sexual y se colocó en quinto sitio en violencia emocional, en tercero en violencia económica y séptimo en violencia física a escala nacional.
Después de la inauguración del primer mural de la serie, Massiel Hernández manifestó que el objetivo de la organización a través de las intervenciones artísticas es visibilizar la situación de las mujeres y concientizar a la sociedad sobre las desventajas en que se encuentran y los problemas que enfrentan.
“Como mujeres nos toca en los diferentes espacios enfrentarnos a muchos tipos de violencia y de inseguridad por el simple hecho de ser mujeres, todo ese tipo de cosas que también tienen que ver con un sistema cultural en que vivimos, que nos afectan directamente y que creemos que tienen que cambiar para nosotras y para las mujeres en general”, dijo Hernández García.
Recientemente, el colectivo organizó un ciclo de cine denominado “Voces de mujeres”, con películas que abordan la problemática de las mujeres y los recursos obtenidos fueron destinados para adquirir los materiales para la elaboración de los murales.
Tomado de: Proceso.com
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